La mayoría de los usuarios tienen claro que para poder jugar en línea con la máxima fluidez y apreciar la elevada resolución de imagen de los vídeos en 4K, deben contar con una conexión a Internet que sea rápida y confiable, ya que las imágenes entrecortadas durante las películas y los tiempos de respuesta lentos en los juegos pueden ser agotadores e irritantes.
A partir de la certeza de esta necesidad surgen una serie de preguntas cuyas respuestas no está tan claras, como ¿mi proveedor de Internet me proporciona realmente la velocidad que asegura? ¿Cuánto ancho de banda necesito para ejecutar las aplicaciones más habituales? ¿Cómo puedo saber con exactitud cuál es la velocidad que tengo disponible?.
Guillermo Marín, director nacional (Country Manager) en España de la firma tecnológica alemana Devolo, especializada en redes domésticas inteligentes para Internet de alta velocidad, aclara para EFE algunas de las dudas más habituales, relativas a la capacidad de nuestra conexión para intercambiar datos entre Internet y nuestros dispositivos.
VELOCIDAD DE INTERNET
La velocidad de Internet es aquella a la que viajan los datos (vídeo, música, documentos, imágenes, entre otros) desde los servidores de origen a nuestra computadora (velocidad de bajada) o al revés, en dirección inversa, (velocidad de subida), consistente en la velocidad con la que se envía la información a Internet desde nuestra computadora, explica Marín.
“Esta velocidad se mide o cuantifica en Megabits por segundo (Mbps), lo cual representa una unidad de transmisión de datos informáticos”, puntualiza.
Esta velocidad depende en la práctica de varios factores, como la utilización de la red, según Devolo.
“Para hacernos una idea, la reproducción de una película en streaming de video, en formato HD (en Alta Definición) o Full HD requiere entre 3 y 5 Mbps” de velocidad de Internet, ejemplifica. En cambio, “para las películas en 4K de alta resolución, la velocidad debe ser de entre 15 y 25 Mbps”, apunta.
Estas son otras velocidades necesarias para ejecutar aplicaciones habituales, según Devolo: streaming de música (2 a 6 Mbps), juegos online (10 Mbps), videollamadas de calidad para teletrabajar desde casa (1.5 Mbps o más).
ANCHO DE BANDA.
“En sentido estricto, el ancho de banda no se refiere a la velocidad de una línea de datos, sino a la cantidad máxima de datos que teóricamente pueden circular por ella en un periodo de tiempo determinado”, según Devolo.
“Imagine una autopista de datos: el ancho de banda indica cuántos carriles hay disponibles para el tráfico de datos y, por lo tanto, qué volumen de datos puede transmitir su línea de Internet”, explican.
Siguiendo con esta analogía, el ancho de banda indica cuántos vehículos pueden circular en paralelo al mismo tiempo, no a qué velocidad lo hacen, concluyen.
VELOCIDADES DE SUBIDA Y BAJADA.
Las ofertas de acceso a Internet no suelen aclarar la considerable diferencia entre las velocidades de descarga y subida, según los especialistas de Devolo.
Explican que “la velocidad de bajada es aquella a la que se produce la descarga, por ejemplo, de imágenes en un navegador web, vídeos en YouTube y descargas de archivos”, mientras que “la velocidad de subida es aquella a la que, por ejemplo, se suben fotos a Facebook o Instagram, vídeos familiares a grupos de WhatsApp o archivos adjuntos a correos electrónicos”.
“Como regla general para las conexiones DSL convencionales, se calcula que la velocidad de datos disponible para las subidas suele ser la mitad de la velocidad disponible para las descargas. Las condiciones exactas varían según el proveedor y el contrato, y deben examinarse con detenimiento”, recomienda.
HERRAMIENTAS PARA MEDIR LA VELOCIDAD.
“Existe una gran variedad de herramientas sencillas para comprobar la velocidad de Internet, y sin necesidad de registrarse. Una de las herramientas recomendadas por Devolo es Speedtest de Ookla”.
También se puede ir a Google.com, buscar “prueba de velocidad de Internet” y ejecutar dicha herramienta en línea.
COMO SE MIDE LA VELOCIDAD.
Las pruebas de velocidad envían datos entre un servidor de pruebas local y el dispositivo para determinar las velocidades de carga y descarga, así como los tiempos de respuesta ‘ping’ (un tipo de comando básico utilizado en Internet), según Devolo.
Un factor importante a la hora de elegir un servidor es su proximidad a nuestra ubicación geográfica y que la ruta de transmisión sea lo más corta posible, aseguran.
Dado que las herramientas de prueba de velocidad suelen seleccionar automáticamente el servidor más adecuado, desde esta misma fuente se recomienda “cambiar de servidor de prueba si los resultados varían considerablemente o si están muy por debajo de lo esperado”.
RESULTADOS MÁS PRECISOS EN LAS PRUEBAS.
Para obtener resultados fiables y conseguir la mayor precisión en las pruebas de velocidad, Marín aconseja “realizar distintas pruebas en diferentes horas del día”.
Esto es recomendable debido a que la velocidad puede variar mucho según el horario, sobre todo en las conexiones a Internet por cable, donde el ancho de banda lo comparten varios hogares.
Es un fenómeno que puede notarse especialmente por la noche, cuando hay más personas conectadas en casa, según comenta.
Además, y dado que la red WiFi puede verse afectada por factores externos, también se aconseja utilizar un ordenador conectado directamente al router con un cable Ethernet (de tipo Cat 5e o superior) y un ordenador veloz, ya que un equipo lento inhibe notablemente el rendimiento de la velocidad de internet.
También es recomendable reiniciar la computadora y el ‘router’ antes de ejecutar la prueba de velocidad, así como desconectar todos los dispositivos móviles y cerrar todas las aplicaciones del ordenador (para reducir el uso de datos a través del router) y borrar la memoria ‘caché’ del navegador (para que los datos almacenados no influyan en los resultados de velocidad).
DESTACADOS:
– La velocidad de Internet es aquella a la que viajan los datos (vídeo, música, documentos e imágenes, entre otros) y se mide o cuantifica en Megabits por segundo (Mbps), explica Guillermo Marín, de la firma tecnológica alemana Devolo.
– “La reproducción de una película en streaming de video, en formato HD (Alta Definición) o Full HD requiere entre 3 y 5 Mbps. En cambio, “para las películas en 4K de alta resolución, la velocidad debe ser de entre 15 y 25 Mbps”, según Marín.
– Para lograr la mayor precisión en las pruebas de velocidad ‘en línea’, Marín aconseja “realizar pruebas a diferentes horas del día, utilizando un ordenador que sea veloz y esté conectado al router con un cable Ethernet de tipo Cat 5e o superior”.
Por Pablo Gutman EFE-Reportajes.