Jorge Luis Rios
ACUÑA, COAH. – El consumo excesivo de frituras o papas fritas puede ser perjudicial para la salud, máxime al considerar que cada vez se crean diversas versiones basadas en altos índices de sodio, calorías, grasas saturadas, colorantes y aditivos.
La jefa del servicio de Pediatría del Hospital General de Zona (HGZ) No. 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Monclova, María del Carmen Sandoval García, señaló que la alimentación debe ser variada y balanceada para lo cual se deben combinar adecuadamente todos los grupos (cereales y legumbres; frutas y verduras; leche y sus derivados; carnes y huevo; y grasas) en porciones correctas.
Llevar una dieta sana trae a las familias, y en especial a los menores, importantes beneficios ya que les permite producir la energía necesaria para realizar las actividades del día, mientras que la comida chatarra -como es el caso de las papas fritas- carece de nutrientes y contiene altas cantidades de calorías.
Mencionó que tan sólo una porción personal supera la cantidad diaria recomendable en la población infantil y abundó que si bien es casi imposible impedir su consumo -ya que son alimentos que están a la mano y se consiguen fácilmente en cualquier establecimiento-, lo que se sugiere es supervisar que se ingieran con moderación y no diariamente.
Recomendó “negociar” con las y los menores el acceso a estos, así como las cantidades y dar prioridad siempre a la comida saludable.
Exhortó a las madres y padres de familia a fomentar una alimentación sana donde se expliquen las bondades de preferir frutas y verduras, las cuales también pueden consumirse como “snack” y su nivel de nutrientes es por mucho mejor.