En las elecciones del Estado de México, considerado “la joya de la corona” de estas elecciones, el PRI no compitió unido, asevera el periodista Raymundo Riva Palacio, situación que lo llevó a una “derrota monumental”.
Además, los resultados en el Edomex, añade el también analista político, pondrán en dilema a la alianza Va por México, al menos por parte del PAN, partido que deberá evaluar si continúa con el PRI o decide “quitarse el lastre”.
“El PAN tendrá que evaluar si mantiene la liga con el PRI o si toma el resultado de ayer para quitarse el lastre de una marca que huele a podrido, como lo vio su candidata Alejandra del Moral en sus recorridos por el estado”, comparte en su artículo más reciente.
ESTOS CONFLICTOS LLEVARON AL PRI AL FRACASO
En los próximos días, Alejandro Moreno Cárdenas, líder nacional del PRI, enfrentará críticas por el fracaso en el Estado de México. Pero, a decir de Riva Palacio, tiene argumentos para justificar el pobre rendimiento:
“La designación y la campaña de Del Moral no estuvo en sus manos, sino en las del gobernador Alfredo del Mazo… Del Mazo impuso a Del Moral, que era su secretaria de Desarrollo Social, por encima de la candidata de Moreno, la diputada Ana Lilia Herrera”, refiere el periodista.
Pese a que Del Moral fue impuesta por Del Mazo, incluso ante la negativa del PAN, partido con el que iban en alianza, el gobernador estuvo ausente en toda la campaña, y ello −dice Riva Palacio− “correspondió a lo que sucedió tras bambalinas, como haber incumplido acuerdos, como los recursos para completar la representación priista en todos las casillas electorales, que fue el último de los problemas”.
Otro de los errores cometidos en el PRI por parte de Del Mazo fue haber colocado al consultor Roberto Trad y a su secretario de Gobierno, Alejandro Ozuna, como estratega y coordinador de campaña de Alejandra Del Moral, respectivamente.
“Ozuna fue un problema continuo y chocó permanentemente con Eric Sevilla, el presidente del PRI mexiquense, lo que generó un ruido que no pudieron acallar dentro de la campaña”, añade. Y a ello se sumó la interlocución como mediador de Héctor Astudillo, exgobernador de Guerrero.
Ese conflicto, según Riva Palacio, causó que no se concretaran los dos millones de votos que el PRI en Edomex creía tener asegurados.
El discreto papel de Del Mazo en la campaña priista, a diferencia de sus antecesores, fue motivo de rumores, como la de que supuestamente aceptó ceder la gobernadora a Morena a cambio de impunidad.
PÉSIMA CAMPAÑA DE DEL MORAL
Las diferencias entre Del Mazo y Moreno fue otro de los conflictos que padeció el PRI al interior, a los que se añadieron errores por parte de la candidata de la alianza Va por el Estado de México.
Algunos de esos errores, según Riva Palacio fueron tácticos, otros estratégicos. Por ejemplo, que Del Moral haya preferido quedarse en su casa con sus hijos los fines de semana y no dedicarlos a la campaña.
Otro desacierto por parte de Del Moral fue “haber asegurado ante varios testigos que, una vez que ganara la elección, iba a aplastar al presidente del PRI y convertirse ella en la nueva líder del partido”.
Todos esos conflictos desviaron al PRI de su objetivo en el Edomex de lograr “vulnerar el blindaje de López Obrador” y también les restó tener una “candidatura creíble que apele a los votantes el próximo año”.
El PRI necesita tiempo, segura Riva Palacio, “para asimilar que perdió por primera vez la gubernatura que tenían desde 1929 y el PAN para decidir si le hacen frente al chantaje de Moreno y se quitan ese lastre”.